viernes, 2 de julio de 2010

Bretestein Destruyó el Transporte Público bahiense.

Después de más de un año de tener a Plaza como empresa prestadora de servicios públicos, gracias a la gestión del actual Intendente, y de conocer en las últimas horas la falta de compromiso del oficialismo para controlar a  una empresa privada de reconocida mala fama, a la cual no solo no se la castiga, sino que se la intenta premiar con un aumento de boleto inminente; es que, desde el Partido GEN, sostenemos que el sistema público de transporte está destruido.

Y lo sostenemos motivados en una simple verdad: mientras menos gente usa el transporte de pasajeros, menos rentable éste se torna. Simple. Cuando aquellos que deben gestionar una acción de gobierno lo hacen privilegiando acuerdos políticos, sin previsión ni planificación estratégica, lo que se termina haciendo es improvisando. Esa es la característica de la gestión de transporte local: la improvisación. Improvisación que llevó a desarmar un sistema de transporte gestionado por empresas locales para armar un sistema a medida de una empresa foránea gravemente cuestionada. Improvisación que llevó a que, ese sistema nuevo,  no cumpliera con ningún requisito de los que se les exigía (incluso a las empresas anteriores). Improvisación que llevó a mucha gente a dejar de usar el colectivo público para volcarse a los automóviles, a las motos, a las bicicletas con motor; todos elementos que representan una verdadera complicación y riesgo en el tránsito. Improvisación que ha motivado que surjan sistemas informales de transporte; como mini-colectivos o remisses truchos desde los barrios hacia el centro. Improvisación, en definitiva, que ha complicado integralmente la vida de la ciudad y de los bahienses y ha degradado la fuerza del Municipio para defender a sus ciudadanos frente a una mala empresa privada.

La verdad es que el Municipio no puede controlar a Plaza.

La improvisación; la inexperiencia y la falta de decisión política de la Intendencia, han terminado por destruir de forma prácticamente irrecuperable un sistema que; con deficiencias; llevaba a la gente de forma predecible y económica a su lugar de destino. Curioso; ¿por qué no se defiende el transporte de los empleados de comercio, de los escolares, de los maestros con la misma energía en  que se ha defendido a ultranza el transporte aéreo de los empresarios? Muy simple; porque el presentismo laboral y escolar de los que andan de a pie; para este Intendente; no es una prioridad. 

Martín Moyano
Partido GEN

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